Durante el tratamiento de ortodoncia frecuentemente es necesaria la extracción de piezas dentales, ya sea por falta de espacio para el correcto alineamiento de las piezas dentales u otros motivos, este procedimiento es bastante común.
Una vez que el ortodoncista ha realizado todos los estudios correspondientes, que comprenden análisis clínicos, de modelos y de radiografías, determinará si es necesario realizar la extracción de una o más piezas dentales y cuales serán estas.
En algunos casos puede ser necesario extraer las llamadas “muelas del juicio” o tercer molar, en otros, puede ser necesaria la extracción de otras piezas tales como premolares o incisivos, lo cual dependerá de las particularidades del caso clínico.
El procedimiento
El procedimiento es realizado bajo anestesia local, motivo por el cual el paciente no sentirá ninguna clase de dolor.
El procedimiento quirúrgico como tal va a depender de la complejidad de la pieza dental en particular, si esta se encuentra sana y correctamente posicionada en boca, el procedimiento será sencillo y corto, sin embargo si la pieza dental se encuentra en una posición anómala y/o cubierta por hueso, la extracción puede complejizarse un poco más pudiendo ser necesaria la utilización de instrumental rotatorio para poder retirar el hueso que cubre al diente y acceder a él.
En estos casos el procedimiento se lleva a cabo en pabellón para mayor seguridad del paciente y porque en él se encuentra el instrumental adecuado para llevar a cabo dicho procedimiento.
Una vez terminado el procedimiento se realizan las indicaciones al paciente sobre cómo debe cuidarse para evitar posibles complicaciones, además de entregarle un protocolo farmacéutico consistente en analgésicos y antiinflamatorios para evitar dolor e inflamación.