Este caso es interesante pues hace 10 años tuvo un grave accidente automovilístico con múltiples fracturas faciales y pérdida de varios dientes. El paciente consultó en muchos lugares y en todos le decían que era un caso muy complejo y que iba a ser muy caro, esto fue lo que me comentó cuando consultó conmigo, efectivamente el caso era complejo porque había pérdida ósea a consecuencia del accidente. Las consideraciones del caso fueron explicadas y entendidas, además de que las expectativas del tratamiento eran acordes a los resultados que debíamos obtener al finalizar éste. El paciente confió y en un día eliminamos el estigma que permanecía desde el día del trágico accidente que estuvo apunto de costarle la vida, la “maldita” prótesis removible. Fue una cirugía compleja, pero exitosa, ahora habiendo finalizado un tratamiento largo, el paciente por fin cerró el capítulo que durante más de diez años recordaba a diario con su “placa removible”.